En relación con la Energía Cooperativa, en el contexto Colombiano, es más frecuente encontrar los términos energía comunitaria y, principalmente:
¿Qué es una comunidad energética?
Con base en el trabajo que hemos realizado en el grupo de investigación en energías renovables de la Universidad EIA definimos una comunidad energética como una agrupación de actores del sector residencial, comercial e industrial rural y/o urbano que busca dar solución a una necesidad energética específica de manera comunitaria. El problema que busca solucionar puede ir desde abastecer la comunidad con energía eléctrica, hasta la implementación de estrategias de eficiencia energética, lo que permite el desarrollo de esquemas donde los usuarios pueden organizarse para no solo consumir energía sino además jugar roles decisivos en términos de la generación, almacenamiento, respuesta a la demanda, entre otras.
En cualquiera de los casos, la solución propuesta por los actores articulados debe tener un enfoque étnico y diferencial que se ajuste al contexto específico de la región, sus necesidades y a sus recursos energéticos. La comunidad debe tener una estructura de cooperación con reglas definidas, roles claros y un esquema equitativo de distribución de los beneficios. Además, es fundamental que durante su diseño se tenga presente la apropiación social del conocimiento y la participación comunitaria.
Formas de organización
Una de las formas de organización es la forma de una cooperativa, pero el concepto de la energía cooperativa es más amplio y no se reduce a una figura jurídica. El modelo cooperativo tiene ventajas importantes para la gobernanza de los sistemas energéticos y la distribución equitativa de los beneficios, pero no es la única posibilidad de generar energía de manera colectiva, la sola unión entre varias personas para cumplir una necesidad o aspiración en torno a la energía y con energías más limpias, ya es energía cooperativa.
También las comunidades, juntas de acción comunal y asociaciones municipales, pueden tener sus iniciativas y proyectos de energía cooperativa.
Desde sus inicios, el cooperativismo se ha guiado por los valores éticos y sostenibles de la cooperación, así con la ayuda mutua, la responsabilidad, la democracia, la igualdad, la equidad, la solidaridad, la honestidad, la transparencia, la responsabilidad social y la sostenibilidad; todos estos pueden apoyar y guiar iniciativas colectivas
De estos valores derivan los principios internacionales del cooperativismo, los cuales se han reestructurado a lo largo de la historia y adaptado a la realidad social y económica del mundo actual, consolidándose en siete, según publica la Alianza Cooperativa Internacional (ACI). Son ellos:
- 1. Membresía abierta y voluntaria
- 2. Control democrático de los miembros
- 3. Participación económica de los miembros
- 4. Autonomía e independencia
- 5. Educación, formación e información
- 6. Cooperación entre cooperativas
- 7. Compromiso con la comunidad
Al ser un concepto nuevo en Colombia, todavía no existe una definición aceptada en el ámbito nacional para representar las iniciativas de Comunidades Energéticas. Sin embargo, la presentada en esta web fue construida en conjunto con diferentes actores del sector.
Ver en la sección del sector energético las figuras para la generación de energía renovable a pequeña escala en Colombia.